Esta mañana mi niño de 4 años se ha despertado cantando… «Así que dibujéeee -porque cantaba alto- una puerta violeta en la pared y al entrar me liberé como se despliega la vela de un barcoooo… despertéeee en un prado verde muy lejos de aquíiii, corrí, grité, reíiii, sé lo que no quiero, ahora estoy a salvoooo» Y yo, anonadada y ensimismada me he dicho: ¡Qué bien!
Esta semana en el cole están haciendo cosas sobre la Violencia de Género con su seño Naira y al preguntarle que qué le parece, me ha dicho: ¡Qué no nos gusta la violencia!
Y a mí me ha dado por recordar a Rozalén y nuestra conversación entre libros y canciones… Aquí la tienes